TESTIMONIOS

Megan

Kumankaya Healing Center es para mí el mejor y más legítimo centro de sanación con plantas medicinales. He visitado centros de retiro similares en Perú y otros lugares, y mis mejores experiencias han sido en Kumankaya. Remi y Ashley son increíbles y sabios curanderos, que han estudiado la medicina a profundidad y que te ayudan a encontrar tu verdadero "yo". Las cabañas y todas las instalaciones son mucho más agradables que las de otros centros de retiro, la mayoría con baño propio en la habitación. Además, la selva allí es mágica, tranquila, con una hermosa vista del cielo nocturno y una espiritualidad que se respira en el aire. Mi proceso de sanación no solo se dio durante las ceremonias, sino también durante mi tiempo recorriendo los senderos o descansando en las hamacas. Kumankaya Healing Center cambiará tu vida. ¡Gracias Remi y Ashley por todo el trabajo que han hecho para dar vida a este mágico lugar!

Vic

¡Esta experiencia superó mis expectativas! En Kumankaya el ambiente es muy amoroso y acogedor, y la atención a los detalles marca la diferencia. Desde el fondo de mi corazón, agradezco a Ashley y Remi por dar más de lo esperado y por su tiempo, amor y compasión; siempre me sentí cuidado y escuchado. Y también están haciendo un trabajo hermoso en esta tierra. Gracias por su sabiduría y amables palabras... en resumen, ¡gracias por ser como son! Siempre atesoraré esta oportunidad y lo especial que fue inaugurar la maloka con ustedes. Bendiciones y amor para los dos. ¡Nos vemos muy pronto!

Kathy

Pasé un tiempo muy favorable en Kumankaya. Me encantó el espacio en el que me hospedaba: siempre muy limpio y el toque femenino de Ashley lo hace muy hermoso. Esta selva maya se siente tan sagrada y protegida... disfruté mucho explorar su naturaleza salvaje. Fue un honor estar en la primera ceremonia en la maloka, esos recuerdos estarán siempre conmigo. Gracias por la sanación, por la hermosa voz de Remi, por sus consejos, nuestra charlas, la excelente comida y, especialmente, por hacerme sentir tan cómoda en el espacio. Gracias por hacer este trabajo, amigos. Mucho amor.

Izzi

A decir verdad, soy un viejo viajero. He estado en el infierno y de regreso, y tengo las cicatrices y heridas para probarlo. Necesitaba un lugar para sanar y aullar. Necesitaba amigos y guías que pudieran entender, aceptar e incluso apreciar mis desafíos particulares. Encontré eso en Kumankaya. Es una joya rara, que los débiles de corazón no entienden, pero sí los corazones humildes que abierta y receptivamente, buscan refugio en la cordura.

Diana

Han pasado 10 meses desde que estuve en Kumankaya y todavía estoy aprendiendo y me sigo expandiendo con la experiencia. Fui recibida por el cálido abrazo de la selva de Quintana Roo, y la voluntad sincera de Ashley y Remi de apoyar mi sanación. Allí conocí a sus amables amigos locales, quienes ayudaron a crear ese espacio profundamente sagrado y me permitieron sentirme como en casa. Allí pude soltarme y ser yo misma, mientras me conectaba con la naturaleza y con la medicina de la abuela. Me sentí completamente apoyada, segura y cuidada por Ashley y Remi. La dieta de la planta era pura, saludable e, incluso, sabrosa. Sentí el cambio en mi cuerpo al tornarse más ligero, limpio y ágil, y el yoga en las mañanas con Ashley también era muy terapéutico. Las noches sin mosquitos en la hamaca leyendo o reflexionando fueron muy tranquilas. La información que recibí de la medicina, así como la ayuda de Ashely y Remi, sigue grabada en mi corazón. Estoy profundamente agradecida por todo lo que ofrece el espacio Kumankaya.

Ashley

Kumankaya... wow. ¿Cómo empiezo? Es un lugar místico y muy especial en este momento, en esta tierra. Es seguro, es profundo, es sanador en todos los niveles y dimensiones de la palabra. La energía aquí es muy limpia y poderosa, y las personas que sostienen el espacio y facilitan el proceso viven en tanto amor. Pasé gran parte de octubre 2019 aquí, sin saber qué esperar además de responder a un llamado interno; pero ahora marcaré este viaje como algo crucial en mi camino. Conocía a Ashley y Remi antes y los honro profundamente como personas de gran integridad, amor y trabajo propio. Este es un lugar hecho para servir y te garantizo que si vienes, te sentirás transformado. Contáctame si quieres hablar más sobre Kumankaya. ¡Amo tanto ese lugar, que me encanta compartir mi experiencia con los demás!

Ian

Meister Eckhart dijo que si la única oración que dices en toda tu vida es gracias, sería suficiente. Hoy voy a decir más... Desde los domingo interminables hasta momentos de risa con las que otros sólo sueñan, en Kumanakaya comencé a experimentar una alegría que no me había permitido en el pasado. Cuando me sentí seguro al aceptar la base del amor sobre el que encarnan sus vidas, comencé a amarme a mí mismo de manera más auténtica que nunca. Gradualmente, esta luz se deslizó en mi cuerpo, mis visiones y mis sueños. Nuestras conversaciones en las hamacas fueron las más profundas que he tenido en mi vida: ampliaron mis creencias a niveles más maduros, lo que naturalmente aumentó el volumen de la voz de mi corazón, y he aquí que mi canto también cambió. El manual de entrenamiento de dieta NR dice que hay 10 pilares para una dieta: amor, compasión, perdón, humildad, gratitud, fe, paciencia, fuerza, coraje y paz. Junto con la autenticidad, integridad y enfoque, todas estas virtudes se han elevado en mí y mi tiempo en Kumankaya ha cambiado completamente la naturaleza de mi paisaje interior. Por eso, palabras como gracias no expresan una fracción de lo que quiero expresar. Tendré que cantarles una canción para eso, pero bendigo sus vidas, su camino y su proyecto; ha sido un honor ver a Kumankaya levantarse. Con toneladas de amor, su hermano, Ian.

Emilie

Estoy muy contenta y satisfecha de haber tenido la oportunidad de pasar unos días con ustedes. Hay tanta energía aquí. Gracias Ashley, Gracias Remi, Irake Ian. Gracias Daisy, gracias Ina y gracias Yoda.